Lactancia en recién nacidos

Es muy importante que su bebé se enganche al pezón correctamente desde el principio. De esta manera además de evitar problemas con la alimentación, también envitará molestias en los pezones como dolor y grietas. La lactancia materna no debe ser dolorosa, por lo que si experimenta dolor e incomodidad, no dude en pedir ayuda.

Como conseguir una unión adecuada

Coloque a su bebé a su lado, con sus estómagos tocando. Incline la cabeza de su bebé ligeramente hacia atrás y presione su mentón contra su pecho, mientras mantiene la nariz lejos del pecho para no alterar la respiración. Una vez que su bebé se engancha correctamente, el pezón debe estar cerca de la parte posterior de su boca, de manera que la leche vaya directamente por la garganta.

Si su bebé tiene problemas para engancharse, trate de cambiar ligeramente de posición hasta encontrar aquella en la que ambos os sintais cómodos. Si está experimentando algún tipo de dificultades con la lactancia, consulte a una matrona o enfermera. Esto le ahorrará estrés y dudas acerca de si está haciendo las cosas bien.

Con qué frecuencia se debe dar el pecho

Una buena regla general es que no se recomienda dar el pecho al bebé con demasiada frecuencia. Sin embargo, pueden alimentarse demasiado poco, así que evite seguir un sistema de lactancia establecido, y alimente a su bebé tan pronto como note los primeros signos del hambre. Estos pueden incluir:

• Mayor actividad
• Búsqueda del pezón
• Golpear o lamerse los labios

Llorar es un signo tardío de hambre, así que intente reconocer los signos anteriores y alimente a su bebé antes de que empiece a llorar. Esto significa que probablemente dará el pecho de 8 a 12 veces al día. Esto es normal en bebés sanos y bien alimentados. Se debe permitir dar el pecho a su bebé mientras succione activamente, después de lo cual puede ofrecerle su otro pecho. Si su bebé tiene mucho sueño, puede que tenga que despertarlo suavemente y ofrecerle el pecho.

Como saber si su bebé está recibiendo suficiente leche

Después de recuperar la pérdida de peso inicial tras el nacimiento, su bebé continúa aumentando de peso. En promedio, los recién nacidos deben engordar alrededor de 200g de peso corporal por semana. Esto es fácil de comprobar a través de los controles de peso regulares, pero también hay otros signos que muestran un bebé bien alimentado. Durante la primera semana, espere un número creciente de pañales sucios cada día (uno en el primer día, dos en el segundo día, etc.). Después del día 4, es normal esperar 4 o más deposiciones al día. Las heces normales estarán sueltas, a veces con pequeños grumos. Cuando se trata de pañales mojados, la dinámica es similar, con el número de pañales mojados aumentando desde del primer día, llegando a 6 o más pañales al día después del día 4.

Si nota que:

• Su bebé no tiene pañales sucios o mojados,
• El color de la orina es oscuro (después del día 3),
• El color de las heces es oscuro (después del día 4),
• Su bebé no toma pecho tan frecuentemente como se recomienda o si
• Sus pechos están doloridos o tiene fiebre y síntomas similares a una gripe,

Debe consultar con su médico.